Me explotó la cabeza (para bien) con tantas emociones… Y, por cierto, me fascinó la comparación cósmica y la sexual.
La novela comienza con la reflexión, la tristeza y la desgana. Todo ello se entremezcla en la garganta de uno de los protagonistas, Troy. Helen, su esposa, y él son una pareja derrotada. La vida no son todo risas, amor y poses de Instagram. La historia plasma el silencio de una relación rota, pero que se resiste a perder.
Y te preguntarás, lector, ¿y el terror? Bueno… Está en todas partes y en ninguna. Ya he dicho que no es para todos los públicos. No solo de terror se compone esta novela de ficción. Además…, bueno, cómo decirlo…. Conocemos esa sensación de angustia muy de cerca.
Realmente los libros de Niña Loba no sé si serán mejores o peores que otros. Ahora, indiferentes no te dejan jamás. Me encanta lo raro, lo diferente y extraordinario. Así que, esta historia no va a ser menos. Me hipnotizó y la recomiendo para todos aquellos que estén dispuestos a sumergirse en este mundo extraño.