¿Recuerdas cuándo tenías 17 años…? A dónde ibas, cuáles eran tus sueños, la música que escuchabas a todas horas, tus libros de cabecera… O puede que no hayas llegado a cumplirlos o tengas ahora mismo esa bonita edad. Pues Lucía Belvis está en este último grupo, y lejos de lo que pueda parecer, lleva a sus espaldas dos libros y muchos proyectos literarios más en su cabeza.
Pero no te dejes engañar, la edad es solo un número. La calidad no va ligada a tus años en la tierra, y Lucía nos lo demuestra. Elimina todos tus prejuicios y déjate llevar, porque te vamos a presentar el futuro de las letras en nuestro país. Si creías conocer a todos los jóvenes de hoy, quédate a escuchar a nuestra jovencísima escritora Lucía Belvis.
Libros:
ENTREVISTA
P.- (N.D.) ¿Qué significa para ti la literatura?
R.- Es complicado. Sobre todo a mi edad, porque hay que encontrar mucho tiempo para hacer cualquier cosa. Porque no es sólo tus hobbies, también tienes que estudiar y tienes que estar pendiente de muchas otras cosas. Pero yo utilizo mi escritura sobre todo como una terapia para poder procesar mis pensamientos, o las cosas que vivo.
P.- (A.D.) Bueno, la mayoría de escritores empiezan con una escritura de terapia. Es la llamada: escritura terapéutica. Empezamos a reflexionar sobre la vida, sobre el más allá, la muerte, lo que sentimos en ese momento… Hoy en día, los psicólogos recomiendan esta escritura terapéutica. Y hay personas que les flore de tal forma que dicen: no puedo dejar de escribir. Ya no es que sea terapéutico, es que es mi vida. Se convierte en un proyecto de vida.
Pero vamos a ir a los inicios, ¿con cuántos años empezaste a escribir?
R.- A los ocho años.
«(…) recuerdo que leer a Carlos Ruiz Zafón me inspiró muchísimo. Así que, considero sus libros como uno de los grandes impulsos que me llevaron a escribir.»
Lucía Belvis
P.- (N.D.) ¿Empezaste también, como has dicho, de forma terapéutica o porque te gustaba leer, por probar…?
R.- De esa edad no me acuerdo mucho, porque era muy pequeña. Pero sí recuerdo que leer a Carlos Ruiz Zafón me inspiró muchísimo. Así que, considero sus libros como uno de los grandes impulsos que me llevaron a escribir. Pero creo que también era un poco terapéutico, para poder solucionar u ordenar los pensamientos que hubiera en mi cabeza.
P.- (A.D.) Qué bonito utilizar a Carlos Ruiz Zafón y sus letras para ordenar sus pensamientos.
(N.D.) Sí, cuánto lo echamos de menos… ¿Con qué libro empezaste?
R.- Con Marina.
P.- (N.D.) Qué guay. No sé, normalmente la gente joven empieza con fantasía o algo así, y Carlos Ruiz Zafón es… literatura de verdad.
(A.D.) Es un autor que por desgracia se nos ha ido muy joven por este temido y malvado cáncer. Y echamos de menos sus letras. Pero, bueno, sabemos que las letras son eternas.
Pues teniendo en cuenta que empezaste con Carlos Ruiz Zafón, que está bastante bien empezar por él. Aparte de que este magnífico autor te ayudara a ordenar tus pensamientos, ¿cómo llegaste a escribir el género que escribes?
R.- Creo que simplemente fue porque tuve un sueño sobre la historia. Entonces, a raíz de ese sueño, vi que era una buena idea e intenté desarrollarla de la mejor manera posible. Verdaderamente no fue levantarme un día y pensar: voy a escribir este género, porque me gusta. Que también me gusta y lo suele leer, pero no fue una decisión como tal. Fue simplemente soñar con la idea, ver que podía trabajar con ella y decidir hacerlo.

P.- (N.D.) Bueno, vamos a recordar a nuestros oyentes que del libro que estamos hablando, fue tu primer libro, que es: La nana de los niños del pelo rapado. Que lo publicaste en 2020.
(A.D.) Bueno, en 2020 y con 15 añitos. Que se dice pronto, pero es un mérito tremendo. El hecho de sentarse a teclear ya es un mérito tremendo, porque hay que saber que la narrativa, escribir, es muy complicado.
(N.D.) ¿Escribías ya antes? Porque empezar una novela siempre es algo difícil de abordar. Supongo que habrías empezado por relatos u otro tipo de textos: poesías…
P.- Sí, empecé con relatos. Y antes de tener esa idea intenté empezar algunas novelas.
Lo que pasa que el problema era la idea, que no conseguía darle del todo forma. Porque creo que lo que intentaba hacer al principio era copiar a Carlos Ruiz Zafón, porque era mi escritor favorito por aquel entonces. Y hasta que no supe que la idea tenía que venir de mí y no tenía que estar inspirada en algo que ya hubiese leído, no fui capaz de desarrollar una idea como tal.
P.- (A.D.) Esos son los llamados Fanfics.
(N.D.) Sí, y creo que es muy importante lo que dices, porque muchas veces los escritores se empeñan en copiar, que es lo habitual cuando empiezas. Pero que ya desde tan joven quieras tener tu estilo creo que es muy importante como escritora.
R.- Sí, es lo más importante para un autor. Si no tienes un estilo que te defina,
no van a querer comprar tus obras.
«He tenido muy buena aceptación y hay mucha gente que ha comprado mis novelas. Pero sí que es verdad que hay gente que no ha querido comprar mi obra porque se pensada que al estar escrita por una chica joven no podía ser de tanta calidad como la de un adulto.»
Lucía Belvis
(A.D.) Un estilo y una voz. Cuando una persona lea una primera página diga: este libro es de este autor o esta autora. Es muy importante lo que dices y que lo diga una chica de 17 años, guau, es maravilloso.
(N.D.) Bueno, estamos aquí diciendo 17 años, 17 años… Pero antes de empezar a grabar hablábamos Axel y yo y decíamos: normalmente, a la gente joven se le castiga mucho, porque en la comunidad literaria te dicen: es que, bah, es muy joven todavía, no hay que tenerlo en cuenta. ¿Te ha pasado?
R.- No, exactamente. He tenido muy buena aceptación hasta ahora y hay mucha gente que ha comprado mis novelas. Pero sí que es verdad que hay gente que no ha querido comprar mi obra porque se pensaba que al estar escrita por una chica joven no podía ser de tanta calidad como la de un adulto.
Y puede que sea así, porque todavía me queda muchísimo por aprender. Todavía no me aclaro con las redes sociales, no sé utilizarlas. Y por eso a lo mejor no estoy llegando a tanta gente como debería. Pero lo estoy intentando y estoy intentando aprender lo más que pueda.
P.- (N.D.) Pues mira, te voy a decir una cosa. Y es que hemos leído parte de tu libro y te aseguro que, nosotros hemos conocido a muchos escritores y mucha gente de todo tipo, tienes más calidad que incluso muchos adultos que empiezan a escribir. O sea, que la edad no importa. Y muchas veces nos fijamos, no solo en la escritura sino en muchos aspectos. Entonces, invitamos a todos, da igual el género, la edad, da igual como seas, los libros son libros y pueden ser perfectamente de la misma calidad o mejor que otros.
(A.D.) Yo voy a meterme, quizás, en un buen fregado. Pero las letras son letras. Hay que leerlas, hay que quitarnos de la cabeza que no somos jueces. Hay que leer los libros y cuando se terminan tienes tu opinión objetiva. Mientras tanto todo lo que digas es subjetivo y no tiene valor. Hay que saber de qué palo va el autor.
Yo en mi experiencia personal —es verdad, hemos empezado tu libro—se lo he dicho muchas veces a Noelia: esta chica me transmite ternura, porque escribir un libro no es fácil. Lleva un proceso de creación muy difícil y todo esto lo digo para que nuestros oyentes sepan que desde muy joven has empezado a escribir. Yo llevo unos años escribiendo, ahora estoy aprendiendo a escribir de manera profesional y te adelanto que es bastante complicado. Si quieres llegar a escribir una novela de calidad—que la tienes, tienes calidad—hay que darle pico y pala. No agobiarse y no querer hacerlo rápido, porque esto es lento. Como la cocción de la abuela.
Cuando leemos a alguien que tiene calidad, nos da rabia que abandone antes de tiempo. Date tu tiempo, date tu cocción.
La nana de los niños del pelo rapado a mí me gusta. Es un libro que para ser el primero, de una trilogía, ¿no?
R.- Sí.
P.- (A.D.) Pues es bueno.
(N.D.) Bueno, ahora nos contarás cuándo saldrán los otros dos libros.
(A.D.) Que por cierto. Tengo que destacar que hay ilustraciones de tu padre.
R.- Sí.
P.-(A.D.) Y la encargada de la corrección ha sido tu madre.
R.- Sí, aunque yo también me ocupo de la corrección con ella. Justo ahora estoy trabajando en la corrección del segundo libro, y antes de empezar la entrevista con vosotros lo estaba corrigiendo.
P.- (N.D.) ¿Cuán importante es entonces tu familia para ti…? Hemos tenido el placer de conoceros y es verdad que estáis muy unidos, y te apoyan mucho. Es verdad que a lo mejor muchos padres no apoyan a sus hijos en esto.
R.- Sí, es prácticamente lo que más me han fomentado: la escritura y la lectura. Y me ayudan muchísimo en este tema. Cada vez que tengo una nueva historia o algo así, siempre intentan leerla los primeros para ver si hay algún fallo que se pueda corregir o algo que haya que cambiar.
Son como el detector de calidad por así decirlo.
P.- (A.D.) ¿Alguno de los dos se dedica al mundo de la edición, ilustración…?
R.- No, ninguno.
P.- (N.D.) Lo hacen por amor a su hija, ¿no?
R.- Sí (risas).
P.- (N.D.) Qué maravilla.
(A.D.) Si tuviéramos un botón de fanfarria o de aplausos, lo pondríamos tres veces seguidas. Es cierto, porque esto es como cuando somos pequeños y le decimos a nuestros padres: “Papá, quiero ser artista”. Lo primero que te dicen es: «anda, y ponte a estudiar para trabajar en algo que te dé de comer». Esto es igual. Y que tus padres te apoyen y te hayan apoyado desde tan jovencita, eso es increíble. Sobre todo a nivel moral, te sientas con placer a escribir.
R.- Sí, la verdad es que sí. Yo es algo que les agradezco mucho, aunque también me fomentan mucho el campo del estudio. Siempre me están diciendo que estudie, que estudie muchísimo para poder sacar las mejores notas posibles y acceder a una carrera que me pueda asegurar un buen futuro. Porque es muy complicado vivir, ya sea de las letras o de cualquier tipo de arte hoy en día.
P.- (A.D.) Sí, la verdad es que sí. Pero, bueno: papás, dejarla escribir. Que esto es maravilloso, hay que seguir publicando libros de Lucía Belvis. Y cada vez mejor, seguro. Que por cierto, ¿cuándo va a salir el segundo?
R.- Yo calculo que tal vez a finales de año o puede ser incluso a final de este verano, pero es más probable a final de año. Porque han salido más páginas de las que yo esperaba y tengo que leérmelo por lo menos dos veces. Luego tiene que leérselo mi madre. Hay que corregirlo entero. Entonces, tenemos que trabajarlo un poco más todavía.
P.- (N.D.) Y del tercero ya ni hablamos, ¿no?
R.- Bueno, el tercero tengo ya escrito lo que sería más o menos el esqueleto de la historia. Tengo ya todas las ideas organizadas y la cronología de las cosas que van a pasar. Entonces, irá casi más rápido que el segundo.
Porque el primero fue el más lento, el segundo lo he escrito más rápido, pero, claro, el proceso de corrección es lento y nosotros no tenemos a nadie que nos ayude. Así que, lo tenemos que hacer todo nosotros, pero el tercero creo que al estar ya haciendo lo que sería la organización, puede ser que salga más rápido, pero nunca se sabe.
P.- (A.D.) Bueno, yo te doy un consejo y es: dale tiempo. Hay libros que se han publicado y han tardado en salir cuatro o cinco años. O incluso hay libros que a lo mejor se publican y no es su tiempo o su momento. Eso le ha pasado hace poco a Víctor del Árbol.
Los libros muchas veces se publican, porque se escriben. Y el libro no termina de cuajar en el mercado. No termina de cuajar en los lectores, porque no es su tiempo. Entonces, no te desanimes escribiendo, dale tu tiempo. Porque tienes que estudiar, tienes que aprender y tienes que seguir escribiendo. No hay ninguna otra forma de aprender a escribir que escribiendo y leyéndote.
Quiero hacer una pregunta y es sobre el libro: ¿a cuántos nenes me vas a despiezar?
R.- En el segundo es todavía peor (risas).
P.- (A.D.) Pero, por favor, qué manera más cruel de despiezar a los nenes.
R.- Sí, eso me lo ha dicho todo el mundo y prometo que no quiero matar a ningún niño (risas).
P.- (A.D.) No, no, por mí encantado. Cuanto más despieces, mejor. Lo bueno es que creas el efecto, pero no llegas al gore.
R.- Bueno…, en el segundo puede ser que sí. Porque ya ha leído parte mi madre y ya me ha dicho que va a ser peor que el primero. Yo no lo veía así, porque en el segundo he metido más partes de comedia por ciertos cambios de protagonistas y de puntos de vista. Entonces, tiene más sarcasmo y más crítica social de una forma un poco más obvia.
Y yo pensaba que no iba a ser tan duro de leer, por eso, porque las cosas las cuento un poco más de coña. Pero mi madre ha dicho que no, que es incluso un poco más traumático.
P.- (N.D.) Entonces, estás en el lugar adecuado. Porque por aquí han pasado muchos escritores de terror…
R.- Eso es lo que me gustaría escribir, porque ahora mismo estoy con la ciencia ficción. Mi madre dice ya que es terror, pero yo sé que puedo hacerlo mucho mejor.
P.- (N.D.) ¿Cómo te organizas para escribir?
R.- El año pasado sí encontraba tiempo para poder escribir todos los días. Creo que por eso logré terminar el segundo tan rápido, porque precisamente hablando de Stephen King, probé su método de escribir seis páginas al día. Y lo conseguía compaginar con los estudios.
Pero este año que ya estaba en Bachillerato era bastante más complicado y no he conseguido escribir todos los días. Y mucho menos corregir, que es un trabajo todavía más pesado. Entonces, voy a utilizar estos tres meses de verano para poder dejar las cosas lo más preparada que pueda para poder afrontar el segundo año de Bachillerato lo mejor posible.
P.- (N.D.) Bueno, lo importante es la constancia y estoy segura que tú la tienes.
No me gusta esta pregunta, porque siempre lo digo, pero no sé cómo decirla de otra manera: ¿eres más de mapa o brújula? Es decir, ¿te lanzas al papel como una loca o te lo planificas, con tus post-it, tus cosas…?
R.- No, yo como una loca.
El esquema que yo debería hacer en un papel, lo tengo exactamente en mi cabeza. Sé exactamente lo que va a ocurrir, en el momento en el que va a ocurrir y cómo. Entonces, en el momento en el que estoy escribiendo estoy reordenando las cosas en mi cabeza. Es una capacidad que tengo y también es que no me gusta gastar papel, entonces no me queda otra.
P.- (A.D.) A ver, cada escritor tiene su técnica. Hay escritores, como puede ser Stephen King también, que son totalmente brújulas. De los que empiezan y, como él mismo dijo, escarban. Escarban y a lo mejor encuentran un ovni o un monumento de la galaxia H5.
Eso también tiene su riesgo. Tiene el riesgo de perderse enormemente por todos lados. A mí personalmente: fifty, fifty. Sí que me gusta una parte brújula, pero hay una parte que o bien tienes un esquema o bien tienes un mapa de escenas que también te ayudan un poco a manejarte con los capítulos.
Otra pregunta, que para mí es interesante, ¿cómo te enfrentas al momento de crear los personajes?
R.- Yo a los personajes los tenía ya creados, por eso de que tuve el sueño. Y al tener el sueño yo ya sabía cómo eran sus personalidades, ya sabía por lo que habían pasado. Entonces, no me supuso un gran reto. Pero a la hora de crear nuevas historias, que es lo que estoy haciendo ahora. Porque aparte estoy con otros proyectos que tal vez presente en algún concurso de novelas o algo así en algunos años.
Lo que hago para crear estos personajes es primero hacerme una imagen visual de ellos, para lo que utilizo una página web que se llama Art Breeder y a partir de ahí intento crear un visual de ese personaje. Y a través de ese visual intento averiguar cuál es su pasado, qué es lo que quiere, cuál es su personalidad… Si se puede decir por su cara o no si tiene buenas o malas intenciones.
Entonces, a partir de un visual ya se va creando para mí la personalidad del personaje.

P.- (N.D.) Has comentado antes, que ha sido así de pasada, tu segundo libro que es: 52 soles y alguna luna, que lo has publicado este año. ¿Cómo ha surgido? No lo hemos leído, pero lo hemos incluido en Novedades Editoriales y da la sensación de que es totalmente distinto al anterior.
R.- Es un recopilatorio de relatos. Porque el año pasado estuve trabajando con una página web internacional llamada precisamente Los 52 golpes. En la que cogían a 52 escritores de todo el mundo para que escribieran un relato a la semana durante todo un año. Yo fui una de las seleccionadas y a partir de ahí tenía que escribir un relato semanal.
La mayoría de esos relatos son terapia, que yo utilizaba. Entonces, hay muchos con tema filosóficos, muchos en los que se reflexiona sobre la vida o la muerte. Aunque también hay algunos de terror o fantasía, pero de esos hay menos.
Pero son esos, los 52 relatos y alguno más que había escrito antes que hice durante ese año.
P.- (A.D.) Hablando de relatos, si no recuerdo mal, llegaste a ser finalista o ganadora de algún concurso.
R.- Sí, hace uno o dos años, fui finalista y este año justo he ganado el primer premio en la categoría de relato corto.
P.- (N.D.) Qué bien, enhorabuena.
Yo te iba a preguntar, porque hemos tenido aquí profesores y nos interesa mucho el tema juvenil, porque al final son el futuro y la lectura ya sabemos que está un poco en decadencia. Tu que eres joven y que te codeas con jóvenes, y lees y escribes, ¿tú cómo ves el panorama?
R.- Antes solía decir que no encontraba nada que me gustara y que por eso buscaba clásicos. Y me siguen gustando los clásicos, pero ahora sí que estoy encontrando más literatura juvenil que me guste y creo que eso se debe a una amiga mía, que también es lectora y está muy metida en la literatura juvenil.
Leo casi todo lo que ella lee, y cada vez que encuentra un libro nuevo me manda cuál es el libro, me dice de qué va e intento leérmelo. Empezó siendo algo que comentar con ella y al final me ha acabado gustando también la literatura juvenil. Sobre todo estoy leyendo libros de dos autoras españolas, que se llaman Iris y Selene. Escriben sobre todo fantasía. He leído de ellas uno que era actual, como Ana de las tejas verdes, pero en la actualidad. Era muy interesante.
P.- (N.D.) ¿Y la juventud lee mucho…? ¿Tú tienes compañeros que realmente lean o sois los menos?
R.- Yo conozco a dos personas que leen, sin contar a mi hermana.
P.- (N.D.) Bueno, está un poco escasa la cosa.
(A.D.) Pero, ¿dos personas de todos tus compañeros y conocidos?
R.- Sí.
A ver, tampoco conozco a tanta gente porque soy un poco introvertida, pero dos personas.
P.- (N.D.) Iremos mejorando poco a poco. Además, tú impulsas a la gente joven. Que la gente joven vea a gente como tú, Lucía Belvis, que escribe, que lee, que estudia y lo compagina todo. Yo creo que eres un ejemplo para los adultos y para los jóvenes.
R.- Muchísimas gracias.
P.- (A.D.) Por supuesto. Y más que hayas dicho que también te gustan los clásicos, cuando son los más difíciles de leer, los más complicados de que gusten. Yo también era así, y me enamoré de la literatura y de la escritura con Calderón de la Barca. Ahí ya empezó mi romance con la literatura.
(N.D.) Hay muchos lectores adultos y escritores, que fíjate lo que te digo, que no leen clásicos y no les gustan los clásicos. O sea, es que me reitero, es que eres un ejemplo.
(A.D.) ¿Y de poesía?
R.- Mm, la poesía la estoy intentado tocar, porque antes no solía gustarme, pero a raíz de leer a un poeta japonés llamado Chüya Nakahara, me gustó muchísimo su poesía y ahora quiero intentar buscar más, a ver que me encuentro por ahí.
P.- (A.D.) Los haikus son bonitos, es un arte…
R.- Sí, pero no era exactamente un haiku, porque él se inspiraba en la poesía francesa. Creo recordar que la inspiró Verlaine y copiaba a veces las estructuras de Verlaine. Incluso creó nuevas estructuras él mismo.
P.- (A.D.) Es cierto que hay mucha gente que se fijaba, y muchos autores lo siguen haciendo, en las estructuras europeas a la hora de hacer poesía. Nosotros a veces nos fijamos en las estructuras estadounidenses, americanas, de literatura. Pero sí, desde luego, que la época de oro de la literatura europea teníamos muchos seguidores.
(N.D.) Ya que estamos hablando de autores, ¿cuáles son los escritores que más te inspiran o que más te gustan? Ya has dicho que empezaste con Carlos Ruiz Zafón.
R.- Me gusta muchísimo también Casandra Clare, que es la autora precisamente de una serie juvenil llamada Cazadores de sombras. También se ha convertido en uno de mis favoritos el que ya he mencionado Chüya Nakahara, y otro autor también japonés llamado Atsushi Nakajima.
Antes solía leer muchísimo a John Green, pero ahora lo he dejado de leer un poco más y me estoy volviendo a meter en Carlos Ruiz Zafón.
Así que, creo que esos son más o menos los autores que más estoy leyendo ahora.
P.- (A.D.) Y para todos los jóvenes que nos escuchen, y adultos, ¿qué libro o libros les recomendarías para adentrarse en este mundo de la literatura para el que no lo haya hecho o lo haya hecho de manera efímera?
R.- Como soy también una alumna de humanidades y este año he estado dando literatura, me he dado cuenta, y aunque no haya leído a este autor, los pocos fragmentos que he tenido que trabajar en clase y leer, me han gustado muchísimo. Y uno de los autores que me han gustado ha sido William Shakespeare, y otro que he estudiado más recientemente ha sido Fiódor Dostoyevski. Estuvimos estudiando en clase la obra Crimen y castigo.
Y también recomendaría a los que les gusta el terror o algo así a Edgar Allan Poe. Porque también tuvimos que leer cosas suyas en clase y es muy buen autor.
P.- (N.D.) Un clásico. A todos los que nos gusta el terror, Edgar Allan Poe va a estar ahí seguro.
(A.D.) Edgar Allan Poe están siempre en las estanterías de todo amante de la literatura. Con Dostoyevski para algunos de sus libros hay que tener, con todos mis respetos, un buen par de cascarones.
R.- Sí, eso es lo que nos dijo mi profesora de literatura, que nos había puesto fragmentos de Crimen y castigo precisamente porque había otros que no eran muy buenos para nosotros.
P.- (N.D.) Como decíamos con Daniel Aragonés, vamos con la pregunta estadística: ¿qué géneros querrías probar y cuáles no?
R.- Yo no puedo con el romántico. Lo puedo leer, pero no lo puedo escribir.
Me gustan autores que escriben obras románticas y las puedo leer, pero me es muy complicado escribir una obra romántica. Prefiero escribir algo en lo que pueda haber más sangre o más muertes. Así que, me encantaría probar el terror.
La ciencia ficción es un género que sí me gusta muchísimo y que leo. Las distopías también me encantan, pero, claro, ya he empezado con eso. La fantasía, que es uno de los géneros que más he leído, puede ser que sea uno de los que quiera probar. Pero el único así que no quiero tocar es el romántico, porque sé que no saldría bien.
P.- (A.D.) Pues te voy a recomendar varios libros que te pueden venir bien. Voy a recomendar un libro en concreto que ha comenzado a publicar hace muy poquito y a un autor. Voy a empezar por el autor. Yo te recomiendo a Lovecraft.
R.- Pues tengo las obras completas en mi cuarto y las he empezado a leer este año.
«(…) la lectura también puede ser muy divertida. Es una gran oportunidad para descubrir cosas nuevas.»
Lucía Belvis
P.- (A.D.) Fantástico. Entonces, para la fantasía y la ciencia ficción te van a venir de lujo. Y la autora y libro que yo te recomiendo, que me lo recomendó Jimena, la editora con la que estoy trabajando, es Vida Samurái, de Julia Sabina. Yo no he salido nunca de la ciencia ficción, el terror, poca fantasía… Me estoy adentrando en unos géneros que yo no había explorado. Y es fantástico, tiene unos párrafos visuales maravillosos que te pueden servir, una historia maravillosa.
En Twitter la puedes encontrar a Julia Sabina. Es super simpática. La verdad es que yo le comenté que el libro es maravilloso, tienes aquí un fan para siempre. Es verdad, es su primer libro y vaya libro, es muy bueno.
(N.D.) Vamos a dejar a Lucía que diga lo que quiera para acabar la entrevista….
R.- Principalmente, que por favor le den una oportunidad a mi libro.
Y que lean, que le den una oportunidad a la lectura. Que, por supuesto, hay muchísimas series de televisión y películas, incluso videojuegos que son muy buenos también para fomentar la imaginación o evadirse un poco. Pero que la lectura también puede ser muy divertida. Es una gran oportunidad para descubrir cosas nuevas.
P.- (A.D.) Una pregunta solo, el colofón antes de la apertura de ese paquete: ¿sabes qué quieres estudiar?
R.- Sí, voy a estudiar un doble grado de Derecho y Criminología.
P.- (N.D.) Criminología está muy bien para despiezar y esas cosas… Muy bien, muy bien. Yo lo veo.
(A.D.) Oye me quito el sombrero, es un placer conocerte. A una persona tan joven que empieza en este mundo y que lo tenga claro, que eso es importante. Y sobre todo que tenga claro estudiar y qué quiere estudiar.
R.- De verdad que el placer es mío. Muchísimas gracias por haberme invitado.
P.- (N.D.) Bueno, pero que esto no termina. Aquí acaba con la cadena literaria. Así que, ya puedes abrir el paquete que es lo que más desean todos los escritores.
R.- Los santos inocentes y Arde este libro.


P.- (N.D.) Arde este libro es de Fernando Marías, que ha colaborado con Javier Hernández. Y tuvo el maravilloso gesto de querer que regalásemos un libro de Fernando Marías, en vez de Los santos inocentes.
Pero nosotros, aparte del que él recomendó, también te enviamos el de Los santos inocentes, porque es una obra maravillosa, que no solo representan —se te ponen los pelos de punta cuando ves la obra—, sino que el libro es una maravilla.
R.- Pues tengo muchísimas ganas de leerlo, porque no he leído ninguno de los dos. Así que, voy a tener que ponerme a ello.
P.- (A.D.) Y ahora la pregunta del millón. Para continuar con esta cadena literaria: ¿qué libro de los tuyos quieres que le regalemos al siguiente autor o autora?
R.- La nana de los niños del pelo rapado, porque ya que va a ser una trilogía y ese libro sí que se va a continuar, pues preferiría que se regalase ese, la verdad.
P.- (N.D.) Ha sido un placer, y te esperamos en Casa Drojan, porque esta ya es tu casa.
R.- Muchas gracias por esta oportunidad. Me ha encantado charlar con vosotros y tener esta entrevista.
Otras entrevistas que pueden ser de tu interés…

Entrevista a Javier Hernández-Simón, Director de escena teatral
Por primera vez, un director de escena teatral nos cuenta la literatura desde otro punto de vista, y te aseguro que Javier Hernández tiene mucho que contarnos.

Javier Peña – Escritor de ficción contemporánea en Blackie Books
Volvemos a reencontrarnos con autores de editoriales importantes, en esta ocasión con un autor de nada menos que de Blackie Books. Javier Peña ha aceptado hablar con nosotros y se ha sincerado por completo. ¿Cómo ve el mundo editorial actual? ¿Y el futuro? Acompáñanos para conocerlo.
¡BOLETÍN DROJANIANO!
¿Quieres formar parte de la familia?